Otra vez sopa en la elección de Rector del Nacional Buenos Aires.
La elección de los tres candidatos al cargo de Rector del Colegio Nacional de Buenos Aires que el Consejo Resolutivo del establecimiento dependiente de la UBA propondrá al Consejo Superior de la Universidad finalmente se realizó de manera secreta la semana pasada.
Los medios, en lugar de explicar los proyectos educativos de los cinco docentes que se postularon, prefirieron destacar la noticia de color del lamentable “reto a duelo” entre los candidatos Lucio Sánchez y Ricardo Romero. Este último que era caracterizado como candidato “kirchnerista” participó activamente en el opositor Partido Socialista, el mismo de Giustiniani y Binner, que proscribió y expulsó del partido a “socialistas K” como Rivas o González por apoyar al gobierno nacional. Su carrera política, tiene “grandes logros” como haber integrado el Comité de Campañas del radical testimonial -por su fracaso electoral-, Cristián Caram y de Roy Cortina, uno de los dirigentes más importantes a nivel local y nacional del Partido Socialista Popular del estanciero Estévez Boero. Cortina, también es el referente político del Movimiento Nacional Reformista a nivel universitario. El MNR formó parte de la Alianza durante la década del ’90 y luego del desplome radical a nivel nacional se separó, pese a lo cual siguió siendo funcional a los gobiernos universitarios de decanos alineados a la Franja Morada a cambio de algún cargo. Además, la política gremial-estudiantil del MNR ha mantenido las prácticas clientelistas de los radicales, con un marcado retroceso comparativo a nivel académico dada la nula formación de sus militantes y su limitadísima inserción a nivel docente. . El apoyo del “Gato” Romero a Cortina también incluyó su participación como fiscal del MNR en elecciones universitarias y el asesoramiento de la legisladora por el PS Verónica Gómez. Para beneficio de todos, Romero retiró su candidatura a último momento por lo que no es necesario seguir hablando de este panqueque político.
El único candidato que aquellos que defendemos el Proyecto Nacional y Popular apoyamos para el cargo de Rector del Colegio Nacional de Buenos Aires es Oscar De Gyndelfeldt, profesor de filosofía cercano al espacio de intelectuales Carta Abierta. Tal como destacan algunos diarios del fin de semana, una maniobra de la Rectora de facto, Rosa Blanca López del Águila impidió que De Gyndelfeldt apareciera en la terna de la cual el Rector Hallú elegirá al sucesor de la removida Virginia González Gass.
Mas allá de la repudiable decisión del Consejo Resolutivo de no hacer pública la reunión y votación de los candidatos, trascendió que el profesor Carlos González obtuvo siete votos, mientras que el radical Gustavo Zorzoli obtuvo tres. Finalmente, el radical Lucio Sánchez y De Gyndelfeldt obtuvieron dos votos cada uno. El empate fue definido por el voto de la Rectora de facto en favor del ex vicerrector en el período 1986-1994 y ex empleado de Horacio Sanguinetti en sus fallidos pasos por la Secretaría de Educación de la Ciudad de Buenos Aires durante el gobierno de De la Rúa y el Teatro Colón en el actual mandato macrista.
La decisión de del Aguila es cuestionable por, al menos, dos razones. Primero, porque de aquella profesora de música que inspiraba respeto en sus estudiantes de primer año ya no queda mucho más que una docente en decadencia que fue la única vice-decana que no presentó su renuncia en apoyo a la rectora removida por el Consejo Superior. Pero lo más importante es que del Águila vuelve a poner al Colegio de espalda a los estudiantes. La reciente muerte del ex presidente Kirchner, unida a la masiva muestra de apoyo popular al modelo de país que Néstor y Cristina han venido impulsando, demostró que ya no es mala palabra ser el candidato oficialista a algún cargo. Y la prueba más cabal de ello es que, en uno de los secundarios históricamente más conservadores del país, una coalición de estudiantes kirchneristas ha triunfado recientemente en las elecciones del Centro de Estudiantes. Por lo tanto, el Nacional Buenos Aires, fiel a su estilo, volverá a ser gobernado por docentes que no representan el modelo de educación que tanto los estudiantes como el resto de la sociedad pretendemos.
La elección de los tres candidatos al cargo de Rector del Colegio Nacional de Buenos Aires que el Consejo Resolutivo del establecimiento dependiente de la UBA propondrá al Consejo Superior de la Universidad finalmente se realizó de manera secreta la semana pasada.
Los medios, en lugar de explicar los proyectos educativos de los cinco docentes que se postularon, prefirieron destacar la noticia de color del lamentable “reto a duelo” entre los candidatos Lucio Sánchez y Ricardo Romero. Este último que era caracterizado como candidato “kirchnerista” participó activamente en el opositor Partido Socialista, el mismo de Giustiniani y Binner, que proscribió y expulsó del partido a “socialistas K” como Rivas o González por apoyar al gobierno nacional. Su carrera política, tiene “grandes logros” como haber integrado el Comité de Campañas del radical testimonial -por su fracaso electoral-, Cristián Caram y de Roy Cortina, uno de los dirigentes más importantes a nivel local y nacional del Partido Socialista Popular del estanciero Estévez Boero. Cortina, también es el referente político del Movimiento Nacional Reformista a nivel universitario. El MNR formó parte de la Alianza durante la década del ’90 y luego del desplome radical a nivel nacional se separó, pese a lo cual siguió siendo funcional a los gobiernos universitarios de decanos alineados a la Franja Morada a cambio de algún cargo. Además, la política gremial-estudiantil del MNR ha mantenido las prácticas clientelistas de los radicales, con un marcado retroceso comparativo a nivel académico dada la nula formación de sus militantes y su limitadísima inserción a nivel docente. . El apoyo del “Gato” Romero a Cortina también incluyó su participación como fiscal del MNR en elecciones universitarias y el asesoramiento de la legisladora por el PS Verónica Gómez. Para beneficio de todos, Romero retiró su candidatura a último momento por lo que no es necesario seguir hablando de este panqueque político.
El único candidato que aquellos que defendemos el Proyecto Nacional y Popular apoyamos para el cargo de Rector del Colegio Nacional de Buenos Aires es Oscar De Gyndelfeldt, profesor de filosofía cercano al espacio de intelectuales Carta Abierta. Tal como destacan algunos diarios del fin de semana, una maniobra de la Rectora de facto, Rosa Blanca López del Águila impidió que De Gyndelfeldt apareciera en la terna de la cual el Rector Hallú elegirá al sucesor de la removida Virginia González Gass.
Mas allá de la repudiable decisión del Consejo Resolutivo de no hacer pública la reunión y votación de los candidatos, trascendió que el profesor Carlos González obtuvo siete votos, mientras que el radical Gustavo Zorzoli obtuvo tres. Finalmente, el radical Lucio Sánchez y De Gyndelfeldt obtuvieron dos votos cada uno. El empate fue definido por el voto de la Rectora de facto en favor del ex vicerrector en el período 1986-1994 y ex empleado de Horacio Sanguinetti en sus fallidos pasos por la Secretaría de Educación de la Ciudad de Buenos Aires durante el gobierno de De la Rúa y el Teatro Colón en el actual mandato macrista.
La decisión de del Aguila es cuestionable por, al menos, dos razones. Primero, porque de aquella profesora de música que inspiraba respeto en sus estudiantes de primer año ya no queda mucho más que una docente en decadencia que fue la única vice-decana que no presentó su renuncia en apoyo a la rectora removida por el Consejo Superior. Pero lo más importante es que del Águila vuelve a poner al Colegio de espalda a los estudiantes. La reciente muerte del ex presidente Kirchner, unida a la masiva muestra de apoyo popular al modelo de país que Néstor y Cristina han venido impulsando, demostró que ya no es mala palabra ser el candidato oficialista a algún cargo. Y la prueba más cabal de ello es que, en uno de los secundarios históricamente más conservadores del país, una coalición de estudiantes kirchneristas ha triunfado recientemente en las elecciones del Centro de Estudiantes. Por lo tanto, el Nacional Buenos Aires, fiel a su estilo, volverá a ser gobernado por docentes que no representan el modelo de educación que tanto los estudiantes como el resto de la sociedad pretendemos.
*por Sebastián Rey (egresado del CNBA e integrante de AJUS)
Comentario:
ResponderEliminarEl Centro de Estudiantes hizo una elección de candidatos a rector y Carlos González recibió el 75% de los votos de los estudiantes, mientras que Oscar de Gyldenfeldt no llegó a los 10 puntos.
La agrupación kirchnerista ganó las elecciones de Mesa Directiva del CENBA con menos de un 20% de apoyo y superando sólo por 13 votos a la segunda fuerza y por menos de 50 a la tercera fuerza.
Por lo tanto, hablar de que los estudiantes quieren una gestión kirchnerista en su colegio no es más que una falacia.
Saludos!
Estimado El objetivo de este blog,
ResponderEliminarEs cierto lo que mencionás sobre la consulta que se realizó entre los estudiantes en la que el Prof. Gonzalez resultó ganador. También sabrás que fue posterior a la publicación del post.
Respecto a los 13 votos y los porcentajes, la realidad es que en la actualidad los estudiantes se encuentran representados por una coalición de estudiantes peronistas, socialistas de izquierda nacional, kirchneristas e independentes. Además, el mejor presidente desde 1983, Néstoy Kirchner, técnicamente no sólo no ganó su elección sino que obtuvo un 22% de votos. Por ende, lo importante no son los 13 votos de diferencia sino como se traducen posteriormente en hechos políticos concretos.
Por otra parte, la sociedad respalda sin dudas a la Presidenta.
De alli, que la frase relativa a que la elección de un candidato cuyo proyecto sea claramente contrario a la voluntad del proyecto nacional y popular -como es Zorzoli- era ir en contra de la voluntad mayoritaria de los estudiantes y de la sociedad no es falaz. Es lógica pura a partir de dos premisas ciertas.
Por último, el Colegio no es sólo de los estudiantes, es de todo el pueblo argentino asi que te invito a reflexionar sobre el rol que debemos cumplir los estudiantes, graduados y docentes del Colegio en esa clave. No solo los estudiantes quieren una gestion kirchnerista del Colegio sino que todos los argentinos también lo queremos. Sin dudas, podemos discutir si González podría haber llevado adelante una gestión kirchnerista pero ya no tiene mucho sentido con las fichas puestas.
Saludos.